La economía bimonetaria, el negacionismo de las castas económicas

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La economía bimonetaria, tiene un correlato reciente en la historia argentina y es el fracaso del gobierno de Juntos por el cambio en el combate a la inflación y las disparadas cambiarias.
En las cercanías de julio del 2022 la vicepresidenta hoy desaparecida de la esfera política, que no se hace cargo de nada salvo de sus causas, se refirió en una de sus alocuciones a la economía bimonetaria y el tránsito de la argentina en ese sentido.
Hoy Melconian junto a Bullrich proponen la economía bimoteria como solución para los acuciantes problemas del país
La coincidencia no es ilógica es solo un diagnóstico de la realidad económica a la que se proponen las viejas soluciones que nada resolvieron.
La llegada del cepo cambiario durante el último gobierno de Cristina Kirchner como presidenta, fue a a causa de la economía bimonetaria que funcionó de manera predominante en el país salvo el interregno de convertibilidad e inflación o y el mal implementado plan austral en el gobierno de Alfonsín. En los diferentes periodos de la etapa democrática argentina lo que se evitó desde la casta política es entender que el dólar es la moneda de refugio que eligieron los argentinos frente al devaluado y menos preciado peso de curso forzoso, moneda nacional.
Los cepos cambiarios, las devaluaciones del peso frente al dólar como soluciones económicas solo han llevado a este tiempo vista, a la destrucción del entramado poductivo y la pauperización del trabajador.
De nada sirve regodearse en los índices de pobreza e inflación conocidos por todo el mundo y por sobre todo por el laburante argentino, los datos solo confirman que los argentinos eligen como refugio de lo producido por su trabajo y las transacciones económicas el dólar blue o ilegal.
Un informe de balanzas de pagos del indec. señalo que, en el 2022, 362258 millón de dólares se encuentran en manos de argentinos, pero fuera del sistema bancario local. Esto significa que la economía bimonetaria no existiria, si no fuera por la obligación de usar el peso, si no que la economía argentina en líneas generales esta dolarizada de facto.
Todos los planes presentados en la actualidad de economía bimonetaria tienden al fracaso y es lo que nos ha llevado a este nivel de situación.
Si uno trata de entender el plan de Melconian entre puteadas y chicanas, trasluce el camino que llevó adelante juntos por el cambio desde el 2015 al 2017 de bimonetarismo el cual terminó con más inflación y cepo cambiario en 2019, política económica que se profundiza con el gobierno de Alberto, Cristina y Massa a niveles de hiper inflación.
Toda esta lógica de funcionamiento bimonetaria tiene por objetivo el efecto negacionista de alcanzar una dolarización con todas las letras como plantea javier Milei y seguir desangrando a la economía argentina convirtiéndola a futuro en la villa miseria más grande del mundo.
El estado mantiene su garrote con el peso argentino para toda la economía interna y el desfasaje del peso contra el dólar, moneda que eligen los ciudadanos argentinos, le sirve solo para seguir manteniendo sus privilegios a través de la emisión monetaria y el impuesto inflacionario.
Las dolarizaciones maquilladas como el caso de la convertibilidad 1 a 1 en la época de Menem, expresan por sus datos que fue uno de los únicos planes económicos que sinterizaron a medias la dolarización y pues a medias perduro.